jueves, agosto 03, 2006

No a la violencia

Esta mujer, Lizzeth Ochoa, bailó con unos amigos en este matrimonio:

En el Matrimonio Escobar ángel-Cohen Iglesias


Por tanto, es una cualquiera, y merece quedar así a manos de su esposo.
Fue golpeada en un club social, luego en un carro que se movilizó al rededor de la ciudad, después cerca a una universidad, y NADIE hizo nada para evitarlo. ¿Por qué? Porque era su esposo quien lo hacía. Durante dos horas!!! No se engañen. No es que su esposo sea "violento" o agresivo. Es que en este país, en pleno siglo XXI, las mujeres siguen siendo cosas, y lo que uno haga en su esfera privada con sus cosas sigue siendo parte de la vida íntima. Por su puesto, la familia de él dirá, "ella ha destruído la familia con esta denuncia". El Tiempo pregunta de manera cínica en el foro "¿Está de acuerdo en que se hagan públicas las denuncias de violencia intrafamiliar?". Claro, si es una familia prestante, parece de mal gusto revelar estas "intimidades". Por su parte, el Diario regional NO HIZO NINGÚN DESPLIEGUE DE LA NOTICIA el día siguiente, como pueden ver en el vínculo de la foto de Sociales. Esta familia tiene dinero y poder. Pero los padres de Lizzeth Ochoa denunciaron, y seguramente serán acosados por ello. ¿Y el resto de mujeres? ¿las que no tienen a dónde ir, ni un trabajo para mantenerse porque dependen del esposo, como debe ser en las "familias decentes"? Este delito, el maltrato intrafamiliar, es "conciliable". Es decir, Lizzeth Ochoa debe ir a una comisaría de familia y verle la cara a quien casi la mata para "conciliar". En otros paises, México o España, la ley prohibe al agresor acercarse incluso a 500m de distancia. Si ella lo hubiese golpeado y hubiese sacado un revolver para amenazarlo, sería intento de homicidio, y no habría lugar a conciliación. Así de simple.
Es muy probable que Lizzeth vuelva con su marido, como hace "la gente decente". Y, si posteriormente ella "se aburre" del maltrato y se consigue "un amante", Dangond tendrá derecho a matarla en "legítima defensa del honor". En esta página es posible que encuentren cómo contactarse con mujeres que les darán cifras y datos escalofriantes sobre la violencia contra las mujeres. En Colombia, en México, en España... no se dejen engañar. Casos como este no son aislados en nuestra sociedad. Aun hoy, en Colombia, en un juicio por violación, se le pregunta a la víctima cómo estaba vestida, si era virgen antes de ser violada, si tuvo muchos novios. Eso pasa en nuestra hermosa legislación, que según muchos hace tiempo dejó de ser "machista". Patrañas. Este no es un caso aislado. Es la consecuencia de vivir en una sociedad que sigue ensañándose con las mujeres. Y se ensaña contra las mujeres porque tienen menos fuerza. Así mismos los padres maltratan a los hijos, puesto que son más pequeños, y los niños terminan desquitándose con sus mascotas. Y los paras atacan a los campesinos ya que los guerrilleros son sus iguales. Es una cadena de maltrato que se extenderá indefinidamente si no empezamos por castigar a los culpables...

9 comentarios:

Anyelina dijo...

Uy sì, que piedra las cosas que pasan en colombia, acà en USA no podes ni empujar a tu mujer porque te jodes!! es increìble no? yo sì no me hubiera quedado con los brazos cruzados, pero es que no entiendo como nadie hizo nada!! grrrrr!

luis dijo...

Pailas...

Sun Dancer dijo...

He vuelto,

::Caro:: dijo...

Tristemente aun aquí en Colombia no solo vivimos en una sociedad patéticamente machista sino violenta, porque en mi opinión a pesar de que los noticieron digan que según un estudio que hizo quien sabe quien, somos el segundo país más feliz del mundo, aquí muy pocos tienen razones para ser realmente felices hemos pasado por años, de guerra, de muertos, de desplazamiento y eso solo ha generado tristeza, dolor e insatisfacción, misma que no desaparece al decir que “Colombia es pasión” no digo que estemos eternamente condenados pero, debemos actuar y reaccionar, castigar a los culpables.

Anónimo dijo...

Ojala la sra. Ochoa nos e retracte y deje regresar a este tipejo a su casa.

cheapness dijo...

Buenos, si este tipo es capaz de hacerle esta "faena" a su compañera ¿Se imaginan lo que sucede en las trastiendas de cada una de esas vidas intachables?

Wife of the 50s dijo...

Esto es inaudito. Menos mal que una nina de sociedad saco esto al aire, porque si hubiera sido otra mujer pobre, es una mas.

que triste..

saludos...

Unknown dijo...

ahhh...definitivamente este no es pais del sagrado corazòn sino del SANGRADO CORAZON

Javier Pimentel dijo...

En primera medida me gustaria señalar que eso de "alto turmequé" es una expresión burda y de "bajo turmequé". El club del country de Barranquilla, por su parte, persigue a cualquier tipo de incauto para embaucarlo con una de sus sucias acciones y eso sí que es de -bajísimo turmequé-.A decir verdad los clubes sociales -sean del turmequé que sean- me tienen absolutamente sin cuidado. El hecho de que un Guajiro con montañas de dinero le haga la cara añicos a su esposa en uno de esos lugares es lo que hace que el suceso sea una noticia tan relevante y que todos la sepamos. Apuesto a que en este mismo momento, en algún lugar del altiplano cundiboyancese hay un sembrador de papa que vapulea a su mujer y nadie se ha enterado. Usted generaliza diciendo que los costeños les pegamos a las mujeres y yo le respondo que eso de generalizar es muy fastidioso. Los cachacos la tienen pequeña, los pastusos son brutos y los chinos saben karate, todas esas son maricadas que le venden a uno a diario. No defiendo al heraldo, que se me antoja uno de los tantos pasquines que circulan diariamente en las regiones de Colombia, tampoco a los Dangond ni a todas las otras pseudonoblezas en decadencia que imponen su voluntad a un montón de idiotas que no pueden pararse firme. Son los Dangond y todos esos apellidos los que fritan la mierda que la mayoria de los costeños comen para el desayuno y son los tarados que se creen eso de los "turmequés" los que mantienen a los Dangond de cocineros. Aunque esto último, si uno se lo piensa, también es una generalización de las más odiosas.

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Los laberintos - Reflexiones sobre la filosofía de la periferia por Alfonso Cabanzo se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.